Qué pereza, en serio
- Esteban Gómez
- hace 6 días
- 2 Min. de lectura
Llevo desde 2009 dedicándome a las redes sociales. He visto, leído y escuchado de todo, y ahora, en pleno 2025, siento que es cuando más pereza me está dando todo.
Lo que me exponen las redes sociales, algunos contenidos, algunas opiniones, algunos puntos de vista. Todo externo. Todo externo, porque el gusanillo por crear, por publicar, por compartir, sigue muy intacto. Lo tengo claro.
Qué pereza, en serio, leer en pleno 2025 opiniones y contenidos en medios de comunicación y webs especializadas que están muy comentadas, casi calcinadas. ¿Imaginas a alguien que en 2025 te dijera que la Blackberry es un avance para el día a día? Pues algo así me ocurre.
A diario leo noticias, posts, con el tono de "Twitter no es una red social", "Twitter es tóxico", "Las redes sociales afectan a la salud mental", "Los jóvenes consumen mucho contenido en redes sociales". No me provoca malestar que se exponga algo así (aunque confieso que me provoca una mezcla de risa y vergüenza ajena), sino que esas voces (supuestamente) sabias se dan cuenta ahora, cuando todo está arrasado.
Me hace gracia, de verdad.
En 2011 ya me insultaban en redes sociales, ya filtraron fotos mías cuando mi presencia en redes sociales era simplemente un avatar de Frank Lampard (fui a la Policía a denunciar y no supieron ni qué decirme, así estaba el percal), ya recibía comentarios críticos de (supuestos) compañeros de profesión, ya recibía hate, ya recibía bullying, ya era consciente de que un uso demasiado alto a diario afectaba a la salud.
¿Y siguen saliendo supuestos expertos y expertas a contarme eso? ¿En qué mundo viven? ¿Qué se creen que ha estado pasando en las casi dos últimas décadas?
Y luego está la otra parte. Los medios y publicaciones que les permiten escribir sobre ello, ¿no se dan cuenta que esos contenidos no aportan, son estériles y son inútiles? Sólo veo un objetivo en publicaciones así: alimentar el ego de personas. No hay más. Venir con esos temas en 2025 está totalmente fuera de lugar, está total desconectado de la actualidad.
¿Qué será lo siguiente? ¿Afirmar que X ahora es de ultraderecha? Aunque, claro, viendo sus tiempos, esta reflexión llegará en 2026 ó 2027...
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