Era temprano. Era temprano y hacía frío. Suelo salir a hacer deporte muy pronto, antes de que amanezca, porque así aprovecho mucho más el día. Es cierto que (me he dado cuenta hace poco) que cuando salgo a estas horas siento que he vivido dos días. Cuando a las 10:00 de la mañana ya te has hecho 16-17 kilómetros, sientes que, pese a que es pronto, has hecho mucho.
Hacía frío, como digo. Un frío húmedo, con una niebla que, además, impedía ver cuándo se hacía de día realmente. Sin embargo, la cosa buena, la parte positiva, es que puedes encontrarte situaciones e instantáneas como estas. Hacía frío, bastante, pero si no hubiera salido tan pronto, si no me hubiera expuesto a hacer deporte en estas condiciones, quizás no conseguiría regalos y recuerdos como estos.
Supongo, quien no se consuela es porque no quiere.
Commenti