No lo escondo. Prefiero Instagram Stories a Snapchat. Empecé a usar Snapchat hace año y medio aproximadamente. Estaba en mi paraíso particular pasando unos días y se me ocurrió que podría abrirme una cuenta en modo «secreto» para experimentar, para usarla, para conocer de primera mano el porqué tanta gente la usaba en ese momento. Estaba en auge. Todo el mundo estaba en Snapchat, y debo reconocer que llegó a ser una de mis redes sociales favoritas durante meses. Incluso cuando vivía en Barcelona. Mis compañeros de trabajo pueden dar muestras de ello. Compartía pensamientos, momentos del día a día, y me gustaba hacerlo porque era una red social simple, sencilla y llamaba a la interacción.
Pero llegó Instagram con su actualización Stories. El primer impacto fue «vaya plagio«, en general. Seguramente la idea de compartir momentos que caducaban a las 24 horas hacía pensar rápidamente que la red social del fantasmita amarillo fue un espejo en el que Instagram investigó. Entonces, nació la red social actual, la que domina el mercado, la que ha crecido a pasos agigantados, la que se ha consolidado en este mercado de los contenidos caducos. Justo al volver a Valencia, tras mi etapa en Barcelona, decidí abrir una cuenta profesional. Tenía la personal, pero vi un mercado interesante en el que seguir expandiendo mi marca personal. Algo más de un año después ya he conseguido crear una comunidad que ya supera los 5.700 seguidores.
Leía recientemente un artículo que hablaba sobre las causas de la victoria de Instagram sobre Snapchat desde múltiples puntos de vista, tanto económicos, sociales e incluso culturales. Pero sobre todo hacía hincapié en el aspecto comercial y de las marcas. ¿Por qué las empresas y la publicidad se ha ido trasladando de forma progresiva hacia Instagram? Las consecuencias han sido de todo tipo, incluyendo que el valor en bolsa de Snapchat ha caído considerablemente.
En este texto se comenta algo totalmente lógico. Instagram tiene muchísimos más usuarios activos. Evidentemente, es clave para las empresas que buscan invertir en publicidad. Las marcas buscan grandes mercados, los mejores escaparates, donde encontrarán más oportunidades de expansión. Es una rueda. Las marcas encuentran más mercado e Instagram sigue viviendo, y creciendo, gracias a ello.
Yo pertenezco a ese mercado de usuarios que hicimos el trasvase Snapchat – Instagram. Sinceramente, lo hice por algo sencillo. Subía fotografías y vídeos en Instagram, y publicaba mis momentos en Snapchat. ¿Qué ocurría? Debía cambiar de app, debía cerrar una y abrir la otra según quisiera hacer una cosa u otra. Cuando llegó Stories a Instagram fue un mensaje claro: «Aquí lo tienes todo». Y así fue. Actualmente tengo perfil en Snapchat, pero no soy usuario activo. De vez en cuando me acuerdo y comparto cualquier cosita suelta, sin más. De hecho, he llegado a borrar alguna vez la app del smartphone porque ocupa espacio y no la uso.
Kommentare