El Chelsea es uno de los equipos más elogiados de la última semana en el fútbol europeo. Su buen partido ante el Real Madrid en el partido de Ida de las Semifinales de Champions League les ha colocado en el mapa para muchos aficionados (por surrealista que pueda parecer).
Su temporada ha sido una montaña rusa que puede dividirse de forma muy clara en dos etapas: con Lampard y con Tüchel. La segunda campaña de Lampard no estaba saliendo según lo esperado y desde el seno del club londinense se tomó la decisión de rescindir su contrato para darle el relevo a Tüchel. Desde entonces, en poco más de 3 meses, el cambio positivo ha sido muy significativo.
Una mejoría incontestable. Sus cifras son demasiado serias como para dejarlas en el olvido y no tenerlas en cuenta, y son de forma notable una carta de presentación que coloca al Chelsea como un posible candidato sorprendente a levantar el título. No son los favoritos. No son el máximo favorito. Eso parece claro, pero sus cifras y lo que resta de torneo ha hecho que muchos aficionados sueñen de forma romántica con un trofeo que, ahora mismo, está a sólo 2 partidos.
El Chelsea de Thomas Tüchel ya se ha rodado en 23 encuentros, de los cuáles sólo ha perdido en 2. Una dinámica imponente que, además, se complementa con 17 de esos partidos dejando la portería a 0. La mejoría defensiva es una realidad. Tanto a nivel estadístico como en las sensaciones.
La presencia de Edouard Mendy en la portería ya se había traducido en un movimiento clave del cambio de dinámica, pero además ahora se traslada también al resto de la defensa. Sus sensaciones son seguras. El Chelsea es una muralla defensiva. La experiencia de jugadores como Thiago Silva y César Azpilicueta ahora sí se traduce en seguridad.
La figura de Timo Werner sigue generando dudas en el ataque Blue, pero lo cierto es que ahora es mucho más participativo, más protagonista. Pese a que sus cifras goleadoras siguen lejos de lo esperado, lo cierto es que la llegada del técnico alemán le ha permitido estar mucho más cómodo, en su hábitat natural, más pegado a la banda izquierda y no tanto como la referencia en el papel de '9'. Es cierto que sigue sin explotar ofensivamente (tuvo una muy clara, por ejemplo, en el encuentro de Ida), pero ha mejorado.
Kanté vuelve a ser Kanté. Lampard dejó algún que otro misterio técnico que acabó sirviendo para su sentencia deportiva. Una de ellos, la ausencia del centrocampista francés, que dejó de ser titular indiscutible para ser suplente. La llegada de Tüchel parece haber devuelto al normalidad al equipo y, en ese escenario, Kanté vuelve a ser pieza clave. Que se lo digan al Real Madrid y la clase maestra de físico y recuperación que firmó en la Ida.
Este Chelsea ha mejorado muy notablemente. Sus cifras pasadas ya no le permiten pelear más allá del objetivo europeo en Premier League, pero en Europa, en la Champions League, es cierto que han recuperado de forma rotunda y contundente su buena dinámica y son un equipo que, a priori, presentará una dura prueba de fuego al Real Madrid.
Comments