top of page

No he podido evitarlo

Escribo esto desde la decepción, pero también desde la satisfacción.


No soy muy dado a dejar libros a la mitad. Es como un compromiso que firmo mentalmente con los autores de los libros que leo. Algo así como un respeto hacia su trabajo y su obra.


No siempre me gustan los libros que leo, pero si me atraen mínimamente hago el esfuerzo y, mejor o peor, acabo leyendo hasta la última página.


Pero no. Esta vez no me ha pasado. He dejado un libro cuando me quedaban como unas 60 páginas, porque ni me atraía su forma de expresar, ni su contexto, ni cumplía tampoco mis expectativas.


En la última semana me he visto 'obligado' a leerlo para intentar acabarlo, pero siempre acababa con la misma sensación de desconcierto. No. No me apetecía. No me atraía ya. No me sentía cómodo leyéndolo porque al final no sabía ni qué estaba leyendo.


Así, tras pensarlo, he quitado el marcapáginas y lo he cerrado.


Ahora ya espera un libro que transcurre en Nueva York, una ciudad que nunca me había llamado especialmente la atención por lo mainstream de todo lo relacionado a ella, pero que en el último año me está despertando cierto gusanillo.


Más vale tarde que nunca, supongo.

6 visualizaciones

Entradas Recientes

En la peluquería, ¿hablas con tu peluquero/peluquera o te quedas en silencio? En un trayecto de taxi, ¿hablas con quien conduce o te molesta que hable? Cuando tienes que viajar, ¿duermes bien la noche

Ocurrió el pasado jueves. Por la tarde, concretamente. Tras mi jornada de trabajo, entré al baño para hacer unas cosas (se entiende, ¿no?) y me puse a leer para empezar a desconectar de un trabajo que

Un trabajo desde casa a media jornada. Mucha cocina. Mucha lectura. Mucho cine y series. Muchos paseos. Mucha fotografía. Algo así es la vida que quiero. No es que la vida que tengo no me guste, pero

¿Te ha gustado este post?¿Te ha gustado este post?
bottom of page