El Liverpool goleaba 0-3 al Bayern de Múnich en el Allianz Arena para clasificarse a la Final de la Audi Cup 2017, donde se enfrentaría al Atlético de Madrid, que a su vez eliminaba al Napoli. Una victoria del conjunto de Anfield que pudo ser mayor, ya que un fuera de juego privó a los Reds de ganar con mayor solvencia en territorio bávaro.
Doble sorpresa. Por un lado, la eliminación local, ante su afición, en su torneo, en su estadio, del Bayern de Múnich. Por otro lado, la forma, la contundencia con la que lo consiguió el Liverpool, que pudo golear todavía más en este ya prestigioso torneo veraniego que sólo se disputa en veranos de cifra impar.
Varios fueron los protagonistas del Liverpool en dos mitades de encuentro de claro dominio británico, donde sólo permitieron que los alemanes estiraran líneas cuando el resultado ya era holgado. Entre ellos, Sadio Mané, quien firmó una actuación soberbia, maravillosa, a un grandísimo nivel que le permitiría ser uno de los jugadores más destacados de la cita en Múnich.
El atacante senegalés es pieza clave de este equipo y sus actuaciones siguen aumentando los porcentajes de dicho estatus deportivo. Sin ir más lejos, el gran bajón deportivo del Liverpool llegaría en el tramo inicial del año 2017, cuando Mané se encontraba concentrado con su selección, Senegal, para la disputa de la pasada edición de la Copa Africana de Naciones. Una baja tan importante y sensible que muchos aseguran a orillas del río Mersey que fue clave para caerse de la pelea por el título.
Lo cierto es que el partido contra el Bayern de Múnich fue un mero partido de carácter amistoso en verano. Más allá del show y protocolo que quiera otorgarle la marca Audi en su torneo, más allá del gran recinto y el gran cartel del campeonato. Pero la actuación de Mané fue extraordinaria, rotunda, siendo clave en un alto porcentaje de las acciones ofensivas y de gol del Liverpool, y manteniendo su importancia como pieza central del esquema Red sobre el terreno de juego a nivel ofensivo.
El conjunto de Jurgen Klopp firmó un extraordinario partido en un todavía mayor reto deportivo. Un resultado sorprendente que otorgará de confianza y seguridad a los ingleses para seguir preparando en las mejores condiciones su reto de volver a coronarse campeón de la Premier League. Un resultado que erigió a Mané como el ídolo de la grada de Anfield en la que ya ha conseguido convertirse en tan sólo una temporada desde su llegada.