¿Qué le pasa al Chelsea?

El Chelsea no atraviesa el momento más regular de la temporada y, seguramente, del último año y medio. El actual campeón de Europa se muestra más vulnerable, errático, concede mucho más protagonismo a los rivales y sus cifras defensivas se encuentran bajo mínimos. Todo ello, en su conjunto, ha creado más de una alarma que ya suenan en Stamford Bridge.

Encaja muchos goles

Desde la llegada de Thomas Tüchel, el Chelsea se había caracterizado por ser un equipo defensivamente muy sólido. Jugadores como Thiago Silva, Antonio Rüdiger o César Azpilicueta se consolidaron como defensas de primer nivel. La solidez defensiva del Chelsea ayudaba en su dinámica de resultados. Afirman que un equipo competitivo se comienza a fabricar desde la zaga defensiva y en ese aspecto los londinenses lo confirmaban de forma muy seria.

Adiós a las porterías a cero

Edouard Mendy se consagró como uno de los mejores porteros del mundo por sus cualidades bajo los palos y sus reflejos felinos. Pero, además, por conseguir un enorme porcentaje de sus partidos sin encajar. El número de encuentros con la portería a cero era tan importante en el global de la temporada que se había convertido en rutina. Ahora, prácticamente imposible.

Stamford Bridge ya no es un fortín

El Chelsea está sufriendo mucho en sus últimos partidos como local. Recientemente han sufrido derrotas importantes en el Bridge ante rivales como Brentford (1-4), Real Madrid (1-3) o Arsenal (2-4), dejando claro que el factor estadio no parece estar pasando por el mejor de sus momentos. Esta dinámica negativa empieza a crear preocupaciones por saber si la tercera plaza podría no estar cerrada del todo.

Comete errores con consecuencias negativas

Los errores defensivos del Chelsea han aumentado de forma considerable. Cesiones inexplicables, pases mal realizados en zona defensiva, errores de Mendy. Los Blues han encadenados una serie de fallos no forzados que han tenido consecuencias muy negativas, ofreciendo a los rivales ocasiones de gol muy claras y convirtiéndose en movimientos totalmente negativos para ellos.