La idea de mudarme a Londres existe desde hace años. Casi como un sueño romántico y platónico, evidentemente es una meta que está presente, en la que pienso muchas veces. Alguna vez incluso me la he planteado de forma seria, real, llegando a mirar precios de alquileres, vuelos, posibles rutinas. Sin embargo, nunca ha salido adelante, nunca ha llegado a materializarse. Hoy encontré una curiosa noticia sobre el alquiler en la ciudad:
Según esta información, las zonas londinenses más baratas se localizan en Erith, Sidcup, Bexleyheath y Blackfen. Los precios pueden oscilar entre las 1000 y las 1100 libras, sobre unos 1250 euros, y sí, son las zonas más baratas. La misma noticia asegura que el alquiler medio ya supera las 2000 libras, por lo que comparación, claro, adquiere lógica al catalogarlo como barato. Casi 1000 libras de diferencia, pero una idea casi imposible para cualquier persona que desee aspirar a su vida en solitario en la ciudad de la multiculturalidad y las oportunidades.
Personalmente, sin conocer las características de las casas, seguramente estemos ante hogares sin demasiados lujos, más bien normales, y alejado de los grandes iconos turísticos de la capital. ¿Vale la pena ahorrarse ese dinero en el alojamiento si luego dependes para absolutamente todo de transporte propio o público?
El titular es jugoso, ya que normalmente "Londres", "alquiler" y "barato" no son términos que van de la mano. Al menos, llamativo. Una vez lees la noticia, no mienten. Te ofrecen las zonas más baratas de la capital inglesa, pero el término barato está muy alejado de lo comúnmente conocido en España. También cabe destacar que se habla de alojamientos completos, no compartidos. Es decir, casas enteras, no habitaciones individuales o dobles, lo que evidentemente sí suele bajar el precio, pese a que en Londres, por ejemplo, tampoco es que sean gangas precisamente. Londres es caro, en general, y noticias así son la clara muestra de ello.
