El Liverpool ha vivido, seguramente, el mejor lustro de su historia reciente. Pese a que ahora parece haber dado un paso atrás, las sensaciones siguen latiendo. De la mano de Jürgen Klopp, han firmado años de auténtico rendimiento notable, se han convertido en un equipo determinante y han recuperado el estatus de club histórico en Inglaterra.
En el reciente rendimiento del equipo de Anfield hubo tres futbolistas que se convirtieron en un tridente de auténtico lujo. El formado por Mohamed Salah, Sadio Mané y Roberto Firmino se convirtió en uno de los tríos ofensivos más temidos del fútbol inglés, europeo y mundial. Sin embargo, los cambios llegaron y las consecuencias acabaron por desmontar ese selecto grupo de jugadores.
El primero fue Sadio Mané, cuando decidió dejar el Liverpool y marcharse al Bayern de Múnich el pasado verano. Una salida tan inesperada como sorprendente. Su rendimiento en Múnich ha sido irregular, de más a menos, con alguna polémica de racismo considerable incluida.
Ahora, este verano, el siguiente en dejar el equipo es Roberto Firmino. Tras no renovar su contrato, se marcha de Anfield tras ocho temporadas luciendo el red del Liverpool. Su protagonismo acabó convirtiéndole en un jugador totalmente secundario, sin apenas participación, muy alejado de lo vivido en los años gloriosos del equipo. Por ello, decidió abandonar el barco del conjunto del Merseyside.
Sin embargo, Mohamed Salah, pese a que ha sonado muchas veces para marcharse, pese a que han surgido informaciones de una posible mala relación con Jürgen Klopp, sigue siendo uno de los máximos referentes del equipo en el ataque. Y ahora lo hace 'en solitario', con compañeros como Darwin Núñez, Diogo Jota, Luis Díaz y Cody Gakpo, pero siendo el gran representante del pasado reciente del equipo. Mohamed Salah no sólo continúa en el equipo, no sólo se mantiene como la última pista de aquel tridente temido, sino que lo hace tras volver a un rendimiento extraordinario. Su temporada ha vuelto a ser positiva, ha vuelto a ser productiva y su figura ha vuelto a alzarse al cielo de Liverpool como un máximo exponente. El delantero egipcio es algo así como el último superviviente. El último superviviente ofensivo de aquel Liverpool que no ganaba partidos, daba lecciones. Evidentemente, en la plantilla se mantienen futbolistas como Alexander-Arnold, Robertson, Alisson, Thiago Alcántara, van Dijk, Fabinho o Henderson. Pero la figura de Salah tiene el 'factor gol' a su favor. Los goles son amores, que dicen, y en ese aspecto el precio del gol le permite ser la máxima estrella del equipo. Por ello, sin Sadio Mané, sin Roberto Firmino, volverá a ser el referente del equipo a partir de la próxima temporada.
Comments