El Chelsea encaraba una interesante temporada tras proclamarse campeón de Europa por partida doble al conseguir levantar la Champions League y la Supercopa de Europa. El reto continental estaba más que cumplido y, entonces, las vistas del presente curso irían destinadas principalmente al territorio insular británico.
La Premier League debía ser el objetivo principal. Ya demostrado un potencial convincente en Europa, el siguiente paso debía ser aspirar a plantar cara realmente a los dos grandes favoritos: Manchester City y Liverpool.
Si ese era el gran deseo, el objetivo, la meta final, no lo han cumplido. Y no sólo no han conseguido plantar batalla por coronarse campeones, sino que han quedado por debajo de ellos. Los pupilos de Pep Guardiola y Jurgen Klopp han vuelto a firmar una temporada excepcional y han sido los grandes protagonistas en la batalla por el título.
El Chelsea lo intentó. Firmaron un buen inicio de temporada en el que un alto porcentaje de puntos conseguidos y las porterías a cero eran una importante rutina, pero pronto llegaron varios tropiezos y sus aspiraciones de gloria se minimizaron hasta dejar a los de Manchester y Liverpool peleando de tú a tú.
¿Ha cumplido expectativas en Premier League? Absolutamente no.
En Champions League no han acabado campeones, pero consiguieron firmar un digno torneo en su búsqueda por reconquistar el título europeo. Su eliminación en semifinales ante el Real Madrid ofreció sus dos caras. Tras caer de forma clara en la ida, en Stamford Bridge, todo parecía decidido de cara a la vuelta, pero fue ahí, en Madrid, cuando pusieron al equipo blanco contra las cuerdas al remontar la eliminatoria. Finalmente, la épica madridistas dictaminó sentencia. Su temporada en Europa ha vuelto a ser positiva. No exitosa ni brillante en términos de títulos, pero sí muy positiva.
En enero firmó uno de los grandes éxitos de la temporada. Tras vencer a Al-Hilal en Semifinales y a Palmeiras en la Final, el Chelsea se proclamó campeón del mundo por primera vez en su historia. Aquel éxito fue la gran nota de la temporada.
No ganó, pero firmó una fantástica actuación en la Carabao Cup. El Chelsea llegó a la Final, pero cayó ante el Liverpool, uno de sus rivales directos por el título liguero. Sin embargo, lo hizo plantando cara, firmando un muy buen encuentro, teniendo hasta tres goles anulados tras decisión del VAR y cayendo tras una tanda de penaltis muy larga en la que incluso tuvieron que participar los guardametas porque faltaban lanzadores. Aquella derrota, pese a no ganar el título, permitió al Chelsea salir reforzado por la buena imagen ofrecida.
El Chelsea ha sido subcampeón de FA Cup al caer en la final ante el Liverpool de Jurgen Klopp. El conjunto Blue volvió a disputar una final desde la llegada de Thomas Tüchel, pero esta vez sin premio. Su temporada en la gran competición copera británica por excelencia no ha sido mala, ni negativa. Tuvo un desenlace fatídico para sus intereses, pero durante el trayecto volvieron a demostrar que es uno de los grandes equipos del país.
A nivel institucional se ha vivido uno de los acontecimientos más relevantes, importantes y serios. Tras el inicio de la invasión de Rusia en Ucrania, el Gobierno británico tomó medidas y sancionó a Roman Abramovich por su vínculo cercano con Vladimir Putin. Aquel movimiento gubernamental hizo que el empresario ruso decidiera vender el club y durante semanas hubo un aura repleto de dudas que cuestionó el futuro tanto de la institución como de cada uno de sus jugadores. Aquella situación no tuvo excesivas consecuencias deportivas en la dinámica del equipo. ¿Qué nota merece la temporada del Chelsea? Evidentemente, no alcanzan el excelente porque han sumado tropiezos inesperados y su imagen también ha estado alejada a la del curso anterior. Sin embargo, han firmado una buena temporada en la que han conseguido títulos, han llegado a finales y han sellado la clasificación para la próxima edición de la Copa de Europa. Quizás un sobresaliente no, pero sí un notable porque su temporada no puede considerarse mala en términos deportivos.
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