top of page

¿Dónde me gustaría trabajar?

Desde hace un par de años (coincide con el inicio de la pandemia, pero no tiene relación directa) sé que el teletrabajo es la mejor forma de rutina. En mi caso, claro. Un teletrabajo bien pagado, no lo que yo creía que era bueno cuando tenía 18-19 años y realmente no lo era.


He teletrabajado muchas veces. Algunas de forma completa, otras de forma híbrida, pero tengo claro que me premia una de las cosas que más valoro yo en mi vida: el tiempo. Mi tiempo lo valoro como si fuera oro, y el teletrabajo me permite tener una rutina estable, convincente, y no robarme de forma gratuita mi tan valorado tiempo.


Ahora, por ejemplo, tengo un trabajo híbrido. Los días que acudo al lugar de trabajo (algún día hablaré de ello), sin exagerar, pierdo en torno a dos horas. Dos horas que no cobro. Dos horas que no recupero. Dos horas en las que podría hacer muchísimas cosas, conociéndome. Pero es cierto que al cabo de la semana trabajo más en casa que de forma presencial. Y lo agradezco.


Cuento todo esto porque soy defensor del teletrabajo. Es mi simple opinión. No quiero decir que sea mejor, o peor. No quiero decir que me niegue (jamás) a trabajar presencialmente, pero un perfecto escenario de elección 100% en mi mano, lo prefiero.


Siempre he pensado que me encantaría teletrabajar en un lugar tranquilo, en un pueblo, en un sitio de desconexión. Tengo varias opciones muy claras. Opciones que, en el hipotético caso, me generaría alguna tensión a la hora de elegir, pero por lo que me gustan y maravillan. Dos concretamente. Uno, mi safe place en Galicia. El otro, en el interior de mi admirada, querida y añorada València.


Me veo acabando mi jornada y, en lugar de verme rodeado de forma masiva por gente, de edificios, de agobio, me veo paseando por entornos maravillosos, en un camino junto al río, con la luz especial de este tipo de lugares. Siento paz, desconexión absoluta (pronto escribiré sobre mi situación actual), silencio, descanso real.


Actualmente, no es posible, porque realmente no es una situación que dependa de mí sólo, pero cuando me limito a pensar, a soñar, a dejarme llevar... Qué sensación tan especial y agradable.

 
 
 

Entradas recientes

Así vivo fuera del ruido

Sobre rincones de paz en internet: Pinterest, Tumblr, blogs, contenidos cozy en TikTok, Instagram o YouTube. Mi relación con las redes sociales ha cambiado mucho en los últimos años. Durante mucho tie

 
 
 
Meses muy especiales

En 2023, volví a casa. Tras casi siete años viviendo en Madrid y una relación de casi seis, todo acabó y el impulso fue volver a casa, a las raíces, donde siempre te acogerán y donde todo tiene el sen

 
 
 
La técnica para que no afecte el hate

Sobre pensar que son bots, que no reales. Quizás sea mentira, pero bloquea algunos pensamientos intrusivos. He sufrido mucho hate en redes sociales. Más antes que ahora, pero aquello marcó mi presenc

 
 
 

Comentarios


¿Te ha gustado este post?¿Te ha gustado este post?
bottom of page