De vez en cuando me apetece refugiarme en una especie de habitáculo audiovisual en el que me siento tan acogido, abrazado, como enamorado. Cada cierto tiempo el cuerpo, la mente, me piden que me deje caer por un par de series y una película que me maravillaron en su día y que (como me ocurre con algún capítulo concreto de algunos libros) me ayudan a distraerme.
Hace tiempo que quiero volver a ver dos series y una película, como digo.
¿Sabrías reconocerlas con estas pistas? Seguro que sí:
Más allá de sus historias, su fotografía. Su fotografía con olor a tinta. Su fotografía granulada. Su fotografía mimada. Me encantan estas tres producciones y, como digo, de vez en cuando la mente me pide dejarme caer ante ellas, ante sus planos, ante sus movimientos de cámara, ante sus localizaciones, ante ellas en general. Me marcaron en su día y creo que son la excusa para volver durante un rato a ese pasado del que muchas veces rehúyo pero del que sé (estoy convencido) que he llegado hasta aquí gracias a ello.
El primer gif pertenece a la maravillosa 'Master of None' (me decepciónó un poco la trama de la tercera temporada). El segundo a la desconcertante 'The end of the fun***in world' (¿qué pasó entre la primera y la segunda temporada?). Y la tercera, quizás algo menos mainstream, mi querida 'Submarine' (esta me marcó demasiado porque la vi en un momento delicado).
Otra serie que quiero ver (porque estoy acabándome ahora House of Cards. Sí, ahora. I'm sorry) es The Newsroom. Sobre todo su primera temporada y sé que, aunque me cueste ponerme a ello, acabaré haciéndolo porque es algo que me pide el cuerpo y no es producto del bombardeo publicitario de las producciones de las grandes plataformas.
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