El reglamento del fútbol, a través de la figura de los colegiados, deja claro que todo mensaje en camisetas, por ejemplo, es motivo de sanción, normalmente tarjeta amarilla. Muchas veces existen casos surrealistas, ya que jugadores felicitan un cumpleaños o una paternidad/maternidad en sus camisetas internas. Un gesto bonito, sin más motivación y efecto que ese, felicitar a alguien. Sin embargo, existen otros casos en los que este tipo de gestos han servido para transmitir mensajes políticos o directamente publicidad. Es por ello que entran en el mismo barco todo tipo de mensaje. Algo similar como las tarjetas amarillas, cuya sanción se aplica a una dura entrada, a una protesta, a un piscinazo o a un simple aplauso. Vacíos legales, todavía por maquillar, que siguen latente en el reglamento del fútbol.
Hablemos del último look de Pogba. Quizás estas líneas queden caducas dentro de poco, ya que los cambios de peinado del centrocampista francés del Manchester United son más rápidos que los Likes de su cuenta de Instagram. Centrémonos, pues, en el que lució durante la pasada gala de la UEFA en Nyon, o en el vídeo que emitieron, ya que no estuvo presente al tener que preparar el encuentro liguero en las horas posteriores contra el Leicester.
Paul Pogba durante el pasado Manchester United-Leicester (Michael Regan/Getty Images Europe)
Un peinado que fue de la mano de la campaña de la UEFA "Equal Game" para luchar por la igualdad en el mundo del fútbol por razones de género o raza. Un futbolista mediático que fue elegido, entre otros, por el organismo europeo como imagen de la campaña. Evidentemente, sus looks siempre llaman la atención y en esta ocasión podía leerse en su cabeza el eslogan de la campaña para convertirle, en cierta medida, en un 'hombre anuncio'.
Siendo objetivos, este look no podría estar permitido. Sobre todo porque fue más allá del acto con la UEFA y lo lució durante el partido contra el Leicester en Old Trafford (2-0). Es decir, Pogba lució un mensaje institucional. No usó su camiseta para ello, sino su peinado. ¿Por qué una camiseta no y sí un peinado? ¿Tiene algo que ver que esté la UEFA por medio? Una respuesta podría ser que se trata de una campaña asociativa, colaborativa, por la que no cobró (que sepamos), pero entonces ¿dónde recae el 'error' y dónde no? La Premier League, el torneo oficial en el que pudo verse, tampoco ha dicho ni tomado decisión alguna.
Parece que cuando los intereses benefician en mayor o menor medida a los de arriba, a los organismos que manejan el fútbol, existen excepciones, y cuando no, se sanciona. Tristemente, me temo que ahí encontramos la solución más probable.